(Foto: Presidente de la ANI, Luis Fernando Andrade, en la socialización del proyecto Rumichaca - Pasto - Crédito: Harold Romo Rosero).
El propósito de esta vía será mejorar la movilidad de los vehículos que se trasladan desde y hacia la frontera con el Ecuador, así como los que se dirigen a la capital de Nariño, con lo que aumentará la competitividad del país y la conectividad con el resto de Suramérica.
“La carretera Rumichaca – Pasto será una vía que impulsará el comercio de Colombia con Suramérica, apostándole a la reactivación del comercio en la zona y brindando un tránsito confortable y seguro con acceso a los puertos del Pacífico Colombiano. Esta vía pronto será una realidad que beneficiará las actividades comerciales y turísticas de toda la zona”. Así lo señaló el Presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, en reuniones de socialización que se realizaron el 16 de agosto en Ipiales y Pasto.
A los eventos asistieron líderes, autoridades y representantes de las fuerzas vivas de la región nariñense. Las comunidades, funcionarios públicos y autoridades conocieron lo que será el proyecto, los beneficios que traerá, así como también el tipo de obras que se realizarán en esta arteria vial.
La carretera Rumichaca - Pasto es estratégica para el comercio del departamento de Nariño y para el comercio con el sur del continente para Colombia. Con las mejoras a la vía, se abrirá una puerta terrestre para el puerto de Buenaventura, consolidado como el principal puerto multipropósito del país.
El proyecto comprenderá la mejora de la calidad de la vía, perteneciente a la Cuarta Generación de Concesiones - Grupo 2: Centro Occidente, y con él se construirá una segunda calzada en la vía que une a Rumichaca y Pasto, que tiene una longitud de cerca de 80 kilómetros. Se duplicará la calzada entre el Intercambiador Sur de la Variante de Ipiales hasta conectar con la Variante Oriental de Pasto y se mejorará la calzada actual entre el Puente Internacional de Rumichaca y la Variante Oriental de Pasto, con lo que se ampliará la capacidad, seguridad y el nivel de servicio de la vía.
“Se construirán intersecciones, túneles, puentes, pontones, retornos y viaductos. La carretera tendrá calzadas de sentidos separados, en promedio de 10,9 metros de ancho, lo que la hará más segura al evitar colisiones frontales como sucede en la vía actual que es bidireccional y tenía un alto nivel de accidentalidad con más de 30 eventos con heridos y víctimas fatales cada año”, destacó Andrade.
La inversión requerida para la realización de esta vía es de $1,48 billones de pesos, generará cerca de 5.500 empleos en la etapa de construcción y beneficiará a más de 600.000 personas del departamento de Nariño y sus poblaciones de Pasto, Tangua, Funes, Yacuanquer, Imués, Iles, Puerres, Córdoba, Contadero, e Ipiales.
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