• Durante los meses que estuvo cerrado el km 58 de la vía Bogotá – Villavicencio, Gutiérrez estuvo encargado de reportar todos los días  a la comunidad, al Presidente de la República Iván Duque y a los medios de comunicación,  los avances de cada una de las 67 medidas adoptadas por el Gobierno Nacional para atender la contingencia.
• Gutiérrez estuvo al frente de las obras emprendidas por la Agencia Nacional de Infraestructura y el concesionario para abrir, lo más pronto posible, la vía.
• El Presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura, Manuel Felipe Gutiérrez, recibió reconocimiento por su apoyo y gestión como gerente nacional de la emergencia por el cierre de la vía al llano. Este reconocimiento fue entregado por la Cámara de Comercio de Villavicencio y la Comisión Regional de Competitividad e Innovación del Meta.

​Para Manuel Felipe Gutiérrez este reconocimiento, más que vanidad es un incentivo a seguir trabajando con pasión y compromiso, no solo por su tierra sino por mejorar la vías, los puertos, y en general toda la infraestructura que acerca y beneficia a los colombianos. 

Durante los meses que estuvo cerrado el km 58 de la vía Bogotá – Villavicencio, Gutiérrez fue el encargado de reportar a diario a la comunidad, al Presidente de la República Iván Duque y a los medios de comunicación los avances de cada una de las 67 medidas adoptadas por el Gobierno Nacional para atender la contingencia.

Además, estuvo al frente de las obras emprendidas por la Agencia Nacional de Infraestructura y el concesionario para abrir, lo más pronto posible, la vía. En este sentido, se destacó la atención de más de 60 sitios críticos e inestables del corredor Bogotá –Villavicencio que no estaba incluidos en el contrato con Coviandes.

En medio de la contingencia también se aceleraron las obras de estabilización en el kilómetro 58 para habilitar la vía en el menor tiempo posible. Allí se comenzaron los trabajos donde se dispusieron alrededor de $120.000 millones, para atender integralmente la emergencia vial, incluyendo la remoción del derrumbe, la construcción de unos pozos de abatimiento y una serie de canales que permitirán un mejor manejo del agua en la montaña, así como su estabilización. 

Actualmente, se está construyendo un tablestacado, una obra muy útil para retener la ladera en el momento en que se presenten lluvias. Esta barrera metálica mitigará los riesgos de deslizamientos durante la época invernal y garantizará la movilidad.

Se espera que al finalizar el año, el kilómetro 58 tenga transitabilidad las 24 horas del día, siempre y cuando las condiciones de seguridad sean seguras para los usuarios.